Monoï
El Monoï proviene de la asociación de dos ingredientes naturales de la flora Tahitiana conocidos por virtudes únicas para la piel y los cabellos : la flor de Tiaré y el aceite de Copra.
Cuál es el origen de este maravilloso aceite?
El Monoï es un producto típico de las islas de la Polinesia francesa, utilizado principalmente como aceite bronceador en Europa. El aceite de Monoï tiene tendencia a solidificarse en el momento en que la temperatura desciende. Efectivamente, por debajo de 20º el Monoï se solidifica, sin afectar sus propiedades. Para poder utilizar este aceite perfumado todo el año, a veces es necesario calentarlo.
Una fórmula que viene de las abuelas de las abuelas de nuestras abuelas… en resumen, no hace falta explicar mucho más
Las flores de Tiaré de Tahití, se recogen cuando aún son brotes y son utilizadas como muy tarde al dia siguiente de su recolección. Se ponen en maceración en aceite de Copra durante diez dias a razón de diez flores minimo por litro de aceite. Al final de este periodo, el macerado es decantado, filtrado y se le añade un antioxidante natural.
Porque es bueno para nuestra piel ?
El Monoï es un ingrediente perfecto para hidratar y aportar suavidad a todas las pieles incluso las más secas. Permite perfeccionar el bronceado de las pieles oscuras o bronceadas aportando una hidratación progresiva y duradera.
Un Monoï auténtico!
Creada en los años 30, la noción de Denominación de Origen tiene como objetivo proteger los productos resaltando su autenticidad y su valor típico a la vez que su origen geográfico y sus métodos tradicionales. Potencia de este modo el nexo íntimo que se establece entre un producto natural y su territorio. En 1992, después de 4 años de estudios e investigaciones, la Polinesia Francesa obtuvo una Denominación de Origen (DO) para el Monoï de Tahití. Esto garantiza a los consumidores la calidad y la autenticidad del aceite a través de los ingredientes, su modo de fabricación y la concentracion del principio activo.